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Foto de grupo frente al castillete del Pozo San Luis |
El pasado 25 de febrero, los guías del
CIM tuvimos de nuevo, la oportunidad de disfrutar de
otra fantástica jornada dentro de las actividades del programa MSM Activo que realiza el
Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, ubicado en Sabero.
En esta ocasión nos desplazamos hasta el Valle de Samuño, un estrecho valle tributario del
Nalón, ubicado en el concejo de Langreo, en el corazón de la Cuenca Hullera Central Asturiana,
y en un entorno natural de gran belleza, rodeado de importantes masas de bosque atlántico y
bosque de ribera. La actividad minera ha marcado de forma notable el paisaje de este valle,
desde hace unos 175 años, dejando numerosos vestigios industriales, algunos de ellos de gran
valor histórico.
La visita al
Ecomuseo Minero Valle de Samuño comienza en la estación de
El Cadavíu, donde se
encuentra el centro de recepción de visitantes y el punto de partida de un tren minero, uno de
los principales atractivos de la visita. La salida del tren minero tenía lugar a las 11:30. Mientras
esperábamos a que llegase la hora, pudimos aprovechar para ver la exposición del centro de
visitantes donde hay fotografías antiguas, herramientas mineras y algunos paneles con
información del recorrido.
El trayecto en tren dura unos 20 minutos y recorre cerca de 2 km. Aproximadamente la
primera mitad del recorrido se realiza al aire libre mientras una grabación va comentando y
explicando algunos de los elementos de mayor interés, no solo relacionados con el patrimonio
histórico minero sino también con el patrimonio natural del valle.
Tras pasar junto a las instalaciones del pozo Samuño, el tren nos adentra en las profundidades
de la tierra a través del
socavón Emilia, que constituye el primer nivel del
pozo San Luis. En
esta parte del recorrido la grabación continúa dando información acerca de los sistemas de
extracción del carbón, del entibado de galerías, ventilación, evacuación de aguas, riesgos y
peligros del trabajo minero, etc. Desde mi punto de vista el hecho de que sea una grabación y
no un guía el que explique el recorrido, hace que la calidad de la visita en esta parte se vea
reducida, ya que en ocasiones no se oye bien por el ruido, y a veces, lo que está explicando la
grabación no se corresponde exactamente con lo que estás viendo en ese momento. A pesar
de ello, la experiencia de recorrer en un tren minero una auténtica galería y sentir la humedad
y el olor característico de este tipo de ambientes, sin lugar a dudas, merece la pena.
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Tren Ecomuseo de Samuño |
El tren se detiene en el embarque de la primera planta del pozo San Luis, donde nos recibe una
guía, que nos ubica en el lugar que nos encontramos dentro del pozo y nos cuenta algunos
aspectos sobre la historia del pozo, el funcionamiento de los embarques y la comunicación
dentro de la mina. Estamos a 32 m de profundidad, de un total de 430 m que tiene el pozo.
Este fue construido a finales de los años veinte del pasado siglo, por la empresa
Carbones
La Nueva, estuvo en funcionamiento hasta 1969 y se mantuvo como auxiliar del cercano pozo
Samuño hasta el año 2002.
Tras la explicación, ascendemos los 32 m que nos separan de la superficie, en unos ascensores
que imitan las antiguas jaulas. Al salir al exterior, lo primero que nos llama la atención es el
monumental castillete de 28 m de altura y la espectacular
Casa de Máquinas del pozo San Luis,
de 1930, que constituye uno de los ejemplos de arquitectura industrial asturiana más
destacados. La empresa
Carbones La Nueva quiso dotar al edificio de aires modernistas,
destacando especialmente la cubierta y la ornamentación de los pináculos de zinc que coronan
los pilares de la fachada principal. Según nos dijo la guía, la utilización de este material se
explica porque Carbones de
La Nueva fue empresa filial de la
Real Compañía Asturiana de
Minas, la cual se dedicaba a la explotación de dicho metal en
Arnao.
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Castillete Pozo San Luis |
Tras contemplar el exterior de la Casa de Máquinas, la guía nos condujo por su interior,
mostrándonos y explicándonos algunos de sus principales componentes, conservados en muy
buen estado, como es el caso de la máquina de extracción, para subir y bajar las jaulas; o los
compresores, encargados de producir el aire comprimido que acciona la mayor parte de las
herramientas del interior de la mina.
Al salir de la Casa de Máquinas, nos dirigimos a las oficinas, donde pudimos ver la pagaduría,
una pequeña ventana exterior a través de la cual cobraban los mineros, ya que estos no podían
acceder a su interior; y a la lampistería, donde permanecen las lámparas y las fichas personales
que identificaban a los mineros.
A partir de aquí, el resto de la visita se realiza por libre, y es posible recorrer y adentrarse en
algunos de los edificios situados en el recinto de la plaza del pozo San Luis. Siguiendo el orden
del recorrido, visitamos la casa de aseo, donde se conservan las duchas, taquillas y perchas
para colgar la ropa; el taller, que cuenta con una pequeña exposición de locomotoras de
ferrocarril; además del botiquín, la carpintería y la fragua. También, junto a la Casa de
Máquinas, pudimos ver la bocamina del
socavón Isabel, una antigua mina de montaña de
1904.
Desde las instalaciones del pozo San Luis, además es visible el cercano poblado minero de La
Nueva, con algunos ejemplos interesantes de viejos cuarteles, las viviendas en las que se
alojaban los mineros y sus familias.
Una vez completada la visita, nos acercamos a uno de los tradicionales chigres de la zona,
decorado, como no podía ser de otra forma, con herramientas y fotos de temática minera.
El retorno hasta la estación de El Cadavíu se puede realizar de nuevo en el tren minero, o bien
caminando a través de una agradable senda verde de 2 km de recorrido, aunque en nuestro
caso, el autobús ya nos estaba esperando junto al pozo San Luis. La duración total de la visita
se puede hacer en unas 2 horas de forma tranquila.
Después de comer, teníamos algo de tiempo libre, así que aprovechamos parte de la tarde
para pasear por Oviedo, visitando algunos de los rincones más emblemáticos de la ciudad y
poniendo fin a otra excelente jornada por tierras asturianas.
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Guías del CIM de Barruelo en el Ecomuseo de Samuño |
Desde el CIM de Barruelo, os recomendamos que os acerquéis a conocer el Ecomuseo Minero
Valle de Samuño, una visita muy completa donde seguro os sorprenderéis y aprenderéis
nuevas cosas sobre la vida y el trabajo de los mineros. Podéis planificar vuestra visita al
Ecomuseo y consultar sus tarifas y horarios en la web (
www.ecomuseominero.es) o a través del
teléfono 984 082 215.
Si queréis saber más sobre cualquier tema relacionado con el mundo del carbón, no dudes en
venir a visitarnos al
Centro de Interpretación de la Minería de Barruelo de Santullán. ¡Os
estamos esperando!
Héctor Fuente